La ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, anunció la oficialización de la Desembocadura del Río Loa como Santuario de la Naturaleza, según el decreto supremo publicado en el Diario Oficial. Este santuario se ubica entre las regiones de Tarapacá y Antofagasta.
Acompañada por el delegado presidencial de Tarapacá, Daniel Quinteros, la delegada presidencial provincial de Tocopilla, Rachel Cortés, y los seremis de Medio Ambiente de Tarapacá, Yerko Lima, y de Antofagasta, Gustavo Riveros, junto con el alcalde de Iquique, Mauricio Soria, la ministra Rojas visitó el nuevo santuario para conmemorar este logro.
«Hoy les traigo una excelente noticia: ¡La Desembocadura del Río Loa ya es un santuario de la naturaleza! El decreto supremo que establece esta nueva área protegida ha sido publicado en el Diario Oficial. Este santuario posee una gran riqueza natural, al ser hogar de una amplia variedad de aves marinas y migratorias, así como de la especie marsupial yaca», destacó la ministra.
Rojas subrayó que este es un avance significativo tanto para la región como para el país, señalando que «enfrentamos una crisis global de biodiversidad, y la creación de este santuario es una acción concreta y urgente para abordar esta situación».
El seremi de Medio Ambiente de Antofagasta, Gustavo Riveros, resaltó la importancia de esta declaración para ambas regiones, señalando que «esto permitirá proteger y conservar un ecosistema valioso. Además, seguimos trabajando para que un tramo del Loa sea declarado como el primer humedal urbano de Calama, protegiendo así la cuenca baja del río más largo de Chile, que tiene su origen en nuestra región».
El humedal costero de la Desembocadura del Río Loa, que abarca aproximadamente 707,9 hectáreas, se encuentra en las comunas de Iquique y Tocopilla, abarcando territorio de las regiones de Tarapacá y Antofagasta, lo que le confiere un carácter birregional.
Este santuario alberga una diversidad de flora y fauna, incluyendo especies como el Tamarugo y el Algarrobo dulce, así como animales como el Lagarto corredor, la Yaca (único marsupial de la zona), y aves como la Gaviota Garuma, el Jote cabeza colorada, y la Gaviota dominicana.
Es crucial destacar que el río Loa es vital para la sustentabilidad de este ecosistema, apoyando la diversidad genética y el mantenimiento de las poblaciones que dependen de estos oasis en el desierto.
Finalmente, es importante mencionar que esta declaración es una de las últimas realizadas bajo la normativa previa a la entrada en vigor de la Ley 21.600, que establece el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas.