Es el más activo del norte de Chile y uno de los favoritos estudiados por volcanólogos de todo el mundo. Se trata del estratovolcán Lascar –ubicado en la comuna de San Pedro de Atacama y cuya población más cercana es Talabre– que hoy pasado el mediodía, entró en erupción abruptamente. Esta actividad se suma a las más de 30 erupciones explosivas que ha experimentado este volcán altiplánico desde el siglo XIX.
De acuerdo a los científicos, Lascar experimenta erupciones conocidas como vulcaniana, de corta duración, de mediana intensidad y explosivas con emisiones de tefra (ceniza y otros elementos volcánicos), proyectiles balísticos (rocas expulsadas durante la erupción), y más una columna eruptiva que hoy alcanzó los 6 kilómetros de altura. Reportes oficiales indican la generación de flujos piroclásticos (nubes calientes de ceniza y fragmentos de roca) menores en los flancos norte y sureste.
En volcanes como el Lascar, indica Felipe Aguilera, director del Instituto Milenio de Investigación de Riesgo Volcánico – Ckelar Volcanes y académico de la UCN, las erupciones vulcanianas suelen producirse por la obstrucción del conducto de desgasificación y posterior liberación de la presión acumulada. “Es decir, es un proceso sub-superficial que no involucra el arribo de magma a la superficie. Este tipo de actividad eruptiva se encuentra dentro del »comportamiento normal» del volcán Lascar”.
Actividad eruptiva
Debido a la reciente actividad, ONEMI declaró Alerta Amarilla para un radio de seguridad de 5 kilómetros del volcán Lascar desde el cráter, lo que limita la actividad turística y los ascensos al macizo. “La recomendación oficial, advierte el volcanólogo de la UCN, es que las excursiones y ascensiones dentro de este radio deben ser suspendidas y reprogramadas. Las visitas al poblado de Talabre, en tanto, deben hacerse solo en casos de emergencia. Se recomienda a los pueblos más cercanos estar atentos a la evolución de la actividad del volcán”.
Si bien esta erupción fue abrupta no es la más grande que ha tenido el Lascar, ya que en los 90’, específicamente el 19 y 20 de abril de 1993, se registró una erupción subpliniana, correspondiente al mayor evento volcánico ocurrido en el norte de Chile en tiempos históricos, asegura la volcanóloga y postdoctorante de Ckelar Volcanes, Susana Layana.
Luego de la erupción de 1993, complementa la experta, el volcán ha tenido erupciones mucho más pequeñas, por lo que esta actividad volcánica del Lascar, corresponde a la segunda más grande del norte. “Debido a esta constante actividad, el Instituto Milenio Ckelar Volcanes, se ha concentrado en ampliar el conocimiento de este volcán en todas sus dimensiones de estudio”, asegura.
Monitoreo volcánico
El volcán está siendo monitoreado de diversas formas: con estudio de fluidos volcánicos de muestreo directo que científicos de Ckelar Volcanes han realizado en forma inédita e instalaron una cámara UV de manera permanente que mide la desgasificación de dióxido de azufre, de una ventana de estudio de al menos 4 a 5 horas diarias. “Pero aún no contamos con transmisión en tiempo real, por lo que un equipo ya se encuentra camino a Talabre para obtener los datos de la cámara UV y de los equipos sísmicos”, dice Susana Layana.
“Existe una tercera forma que estudiamos el Lascar, agrega la geóloga, que es tratar de entender la dinámica interna del volcán por medio de estudios de geofísico, y, saber por ejemplo, la ubicación de las cámaras magmáticas, y las distancias entre las cámaras y el cráter”.
Finalmente la volcanóloga advierte que en estos momentos es muy riesgoso realizar ascensos al volcán Lascar, hasta que la Alerta Amarilla emitida por ONEMI Antofagasta, no sea levantada. “Esta tarde nos comunicamos con la comunidad de Talabre y hasta el momento no hay incidentes y la población se encuentra a salvo”.